La coopetición no solo es posible, sino que se presenta como una respuesta estratégica para los desafíos de un sector en transformación.
En el VII Observatorio de la Posventa Oficial, organizado por Faconauto y la AMDA, se desarrolló un interesante panel titulado “¿Veremos ‘coopetición’ en la posventa oficial a medida que las redes se concentren?”, que abordó los desafíos de un sector en constante cambio, en un contexto donde la colaboración entre competidores puede ser clave para adaptarse al mercado.
El director de investigación de ICDP Francia, Thomas Chieux, abrió el panel con una visión detallada sobre el futuro de la posventa, explorando cómo la industria debe adaptarse a la adopción masiva de vehículos eléctricos (BEVs), al envejecimiento del parque automovilístico y a la reducción de los puntos de servicio franquiciados de los OEM en Europa, que ha decrecido un 8% entre 2017 y 2022.
“La realidad es que, con menos puntos de servicio y una menor demanda de trabajos de reparación y mantenimiento, los concesionarios supervivientes tendrán que ampliar su capacidad de servicio”, comentó Chieux, enfatizando que la presión sobre el sector requiere la implementación de estrategias innovadoras.
“La coopetición con operadores independientes es una aproximación interesante. Esta cooperación entre OEMs y IAM (talleres independientes) podría ser fundamental para mantener el volumen de actividad en la posventa, sobre todo en el segmento de vehículos más antiguos”.
En este sentido, el director de investigación de ICDP Francia explicó que en un contexto de cambio profundo, es esencial que los fabricantes diversifiquen sus estrategias con servicios como contratos de mantenimiento, cobertura de garantía extendida y modelos de negocio flexibles. “Mantener la actividad de posventa es vital para el canal OEM; para compensar la reducción esperada en sus redes, deberán explorar el potencial de la coopetición”, concluyó.
Tras la intervención de Chieux, se llevó a cabo un coloquio moderado por el periodista Raúl González, en el que participaron líderes de diversas áreas de la industria. Los ponentes discutieron los desafíos de la posventa y la necesidad de establecer estrategias de coopetición:
Pablo Parra, director general de Vemare, subrayó que en un escenario de concentración de redes, la cooperación estratégica es indispensable para asegurar la satisfacción del cliente. “Cuanta más concentración, más estrategia necesitamos, relacionándonos entre todos. Al final, hay un usuario que tiene que quedar satisfecho en su reparación, y para eso nos necesitamos unos a otros”, declaró Parra, recordando que la experiencia del usuario es el punto de mira de toda iniciativa.
Por su parte, María Barbero, responsable de Desarrollo de Negocio en BASF Coatings Española, abordó la idea de una “coopetición sostenible”, no solo en términos de eficiencia energética, sino también considerando el bienestar de los trabajadores y la viabilidad económica de los talleres. “La coopetición debe ser sostenible en todos los sentidos, no solo en términos energéticos, sino también en que los costes no lleven a los equipos a niveles de productividad insostenibles. Además, la formación de marcas y fabricantes es crucial para adaptarse a la diversidad de vehículos y tipos de superficies que existen”, indicó Barbero, abogando por un enfoque que considere tanto la capacitación como la equidad en el sector.
Fernando de Santiago, director general de Grupo de Santiago, señaló que la coopetición ha sido una práctica frecuente en el sector, pero que hoy en día es aún más necesaria para enfrentar los retos del Vehículo de Ocasión (VO). “Llevamos coopetiendo muchos años. Actualmente, cada vez vamos a tener que coopetir más. La rentabilidad no es solo cuestión de talleres; también necesitamos mayor capilaridad para atender como se merece el mercado de VO y reducir la rotación de personal”, explicó De Santiago, resaltando la importancia de mejorar la eficiencia en todo el proceso.
Finalmente, Ricardo Orcoyen, director de prestaciones de Grupo Mutua, destacó el contexto difícil del sector asegurador, afectado por una estructura de costes elevados y primas que no alcanzan a cubrir los gastos. “El sector de seguros tiene un problema estructural de costes muy alto; llevamos años reportando pérdidas, especialmente en el segmento de autos. Es obligatorio que cooperemos para controlar el coste, de lo contrario no podremos sostener el negocio”, afirmó Orcoyen, destacando la necesidad urgente de colaboración para enfrentar los costos.
Este panel en el Observatorio de la Posventa Oficial dejó claro que la coopetición no solo es posible, sino que se presenta como una respuesta estratégica para los desafíos de un sector en transformación. La colaboración entre fabricantes, talleres oficiales e independientes y aseguradoras será vital para mantener la actividad de posventa, asegurar la rentabilidad y, en última instancia, mejorar la satisfacción del cliente en un entorno cada vez más competitivo y concentrado.