De las propuestas, solo cuatro recibieron votos a favor. Estas incluían el desarrollo de una política industrial para sectores críticos como la automoción, mejorando la eficacia del Perte VEC y garantizando planes de inversión estructurales a largo plazo. Asimismo, se votó a favor de mejorar el tratamiento fiscal de la innovación para equipararlo al de los competidores europeos, y de crear un Plan Moves Recarga para facilitar el desarrollo de infraestructuras de recarga.
En esta línea, desde Faconauto señalamos que el resultado de la votación muestra una exigencia de objetivos ambiciosos de descarbonización sin proporcionar herramientas para cumplirlos. Incidimos en la necesidad de medidas como estímulos fiscales y ayudas directas para la adquisición de vehículos electrificados.
Por otra parte, destacamos la importancia de no descartar otras tecnologías basadas en motores de combustión durante esta transición hacia la electrificación, a lo que se conoce como neutralidad tecnológica. Sin embargo, muchas propuestas de la PNL, como un nuevo programa Moves para el periodo 2024-2027 y la simplificación de trámites administrativos para impulsar infraestructuras de recarga, fueron rechazadas.
Insistimos, además, en que a pesar del aumento de normativas, no se brindan los recursos necesarios al sector para cumplirlas. Este sentimiento se vio reforzado con la aprobación en el Parlamento Europeo de medidas más estrictas sobre las emisiones de CO2 para camiones y vehículos pesados, lo que complica los objetivos de reducción de CO2.