La previsión para 2023 es que cinco millones de vehículos eléctricos circularán por España.
El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, PNIEC, establece que España debe tener en sus carreteras más de cinco millones de vehículos eléctricos en 2023. Para ello, es necesario que se desarrollen más de 3,3 millones de infraestructuras de recarga a nivel nacional, de los que tres millones deben ser puntos de carga privados, según indica la organización ECODES en el Estudio sobre el despliegue de la infraestructura de carga del vehículo eléctrico en España.
España a la cola en la recarga pública
Los puntos de carga públicos tienen una función complementaria, pero España sigue a la cola en movilidad sostenible.
En un ranking de cargadores públicos por países, Países Bajos lidera con 64,1 cargadores por cada 100km, Alemania con 25,8, Portugal con 24,9 o Italia con 9,2. Mientras que España ocupa la decimonovena posición con tan solo 1,7 cargadores públicos, una cifra que debe ascender a 300.000 el próximo año para cubrir la demanda.
¿Qué eléctricos circularán por España en 2023?
El próximo año cinco millones de vehículos eléctricos circularán por España, entre los que se incluyen furgonetas, motocicletas y autobuses. Estos necesitan un mínimo de 3,3 cargadores para dar servicios a los conductores y garantizarles que siempre puedan disponer de sus vehículos.
En 2022 el PNIEC fijó que España debía alcanzar los 45.000 puntos de recarga, superando los 100.000 en 2023. Un objetivo que solo puede hacerse realidad con el desarrollo de estaciones de carga privadas en hogares, 1’25 millones; lugares de trabajo, 1,4 millones, y cocheras, 350.000 puntos. “Las infraestructuras de carga privadas deben ser la base para impulsar la electromovilidad”, afirma Henrik Bergman, director regional de Charge Amps en España y Portugal defendiendo que hay que desarrollar una red de cargadores funcional acorde al uso real del conductor.
El 1 de enero de 2023, entrará en vigor el real decreto -ley 29/2021 que establece la obligatoriedad de disponer de un punto de carga en todos los aparcamientos privados no residenciales con más de 20 plazas, y disponer de puntos extra por cada 40 plazas. Siendo así, hoteles, supermercados, restaurantes, oficinas o centros comerciales deberán reestructurar su espacio para incluir las estaciones de carga eléctrica. De igual modo, las gasolineras adaptarán sus servicios para ofrecer también puntos de recarga a sus clientes.
El Plan Moves III incluye ayudas directas para la instalación de puntos de carga privados. Tanto particulares como empresas pueden cubrir hasta el 80% del coste de la estación de carga y de su instalación.