Este documento, promovido por la patronal europea de fabricantes (Acea), plantea modificaciones a la política de la Comisión Europea al abogar por la competencia y criticar el proteccionismo.
Las propuestas del lobby automovilístico se enfocan en la producción, la oferta y la demanda. En líneas generales, los líderes empresariales instan a las instituciones europeas a “desarrollar una estrategia industrial integral de la UE en todas las etapas de la cadena de valor digital y sostenible: desde I+D, minería, refinación, componentes y fabricación; hasta redes de carga, energía, incentivos de compra y reciclaje a lo largo de todo el ciclo de vida”.
Una razón, según ellos, para oponerse al proteccionismo es la necesidad de acceder a materias primas y componentes producidos en otras regiones geográficas. En este sentido, instan a la UE a negociar acuerdos comerciales con terceros países. Sin embargo, existe la preocupación de que el expediente abierto a China por presuntos incentivos abusivos a la producción de vehículos eléctricos, que luego se comercializan en Europa, pueda ir en dirección contraria debido al riesgo de desencadenar una guerra comercial.
PREVISIÓN DE VENTAS DEL PRÓXIMO AÑO
En el ámbito industrial, el manifiesto aboga por “crear las condiciones propicias para fabricar una amplia variedad de vehículos de cero emisiones, incluyendo vehículos eléctricos pequeños que sean accesibles para la compra y rentables para la producción en Europa”. Además, destaca la importancia de “agilizar la mejora y reconversión de la fuerza laboral”.
En cuanto al mercado, la industria propone “expandir los incentivos de compra, los programas de adquisición y los beneficios fiscales tanto para consumidores como para empresas”, aumentar la infraestructura de puntos de carga eléctricos e de hidrógeno, y cautivar a los usuarios mediante “políticas inteligentes”.
Por otro lado, Acea anticipa un aumento del 2,5 % en las ventas de automóviles en la UE para el año 2024, después de un incremento del 12 % en 2023, con alrededor de 10,4 millones de vehículos, aunque aún por debajo de los niveles previos a la pandemia. Se proyecta que la cuota de mercado de los vehículos eléctricos en la UE alcance aproximadamente el 14 % o 14,5 %, experimentando un crecimiento del 55 % en el presente año y llegando al 20 % el próximo.