Entre los principales desafíos en la transición hacia la electrificación se encuentran la limitada autonomía de los vehículos eléctricos y la insuficiente infraestructura de recarga.
El 54% de las empresas españolas planea electrificar completamente su flota de vehículos, según el segundo Estudio de Monitorización de Emisiones de Flotas en Europa de Alphabet Internacional, el servicio de movilidad empresarial del Grupo BMW. No obstante, este porcentaje ha disminuido 10 puntos porcentuales respecto a 2023, lo que podría indicar que las empresas están subestimando la complejidad de la electrificación.
El informe también revela que el 59% de los gestores de flotas se sienten poco informados sobre la movilidad eléctrica, lo que dificulta la transición hacia la electrificación. Entre los principales desafíos se encuentran la limitada autonomía de los vehículos eléctricos y la insuficiente infraestructura de recarga.
Además, el estudio destaca que el 70% de los gestores de flotas subestiman los requisitos derivados de la Directiva sobre Informes de Sostenibilidad Corporativa (CSRD). Esta normativa afectará a aproximadamente 49.000 empresas de la Unión Europea entre este año y 2026. A partir de enero de 2024, las grandes empresas de interés público o con más de 500 empleados deberán medir su desempeño ambiental, social y de gobernanza (ESG), y publicar un informe de sostenibilidad que incluya las emisiones de CO2 de sus flotas.
LA SOSTENIBILIDAD, UN ASPECTO CLAVE
Según el análisis, el 26% de las empresas encuestadas aún desconocen las emisiones de CO2 de su flota, a pesar de que el 43% considera la sostenibilidad un aspecto clave en la gestión de flotas. Aunque hay una tendencia positiva con un aumento de 9 puntos porcentuales en las empresas que monitorizan sus emisiones, alcanzando el 33%, el 41% de las flotas todavía superan el límite de 100 g/km de CO2, aunque esto representa una mejora de 10 puntos porcentuales respecto al año anterior.
El informe también señala que solo 2 de cada 10 gestores de flotas utilizan herramientas para medir y analizar las emisiones de CO2. Alberto Copado, consejero delegado de Alphabet, advierte que la falta de adopción de estas herramientas supone una gran oportunidad perdida, ya que los datos obtenidos son cruciales para los informes de sostenibilidad y para decidir la mejor combinación de sistemas de propulsión en la flota.
Finalmente, el estudio subraya que para 2025 la Unión Europea espera que las empresas sigan reduciendo sus emisiones de CO2. Copado concluye que, “sin digitalizar la gestión de flotas, electrificarlas y utilizar la inteligencia artificial y la monitorización de datos, las empresas no podrán cumplir estos objetivos ni superar los umbrales mínimos establecidos”.