Cualquier persona que siga el mundo del motor es consciente de cómo ha evolucionado un actor tan importante como China en los últimos años. Ha pasado de ser un país reconocido principalmente por hacer copias de reconocidos modelos de la industria a ser un peso pesado con marcas reconocidas que están agitando los cimientos de la hegemonía europea y estadounidense.
Tras los estragos y consecuencias que ha provocado la pandemia, la producción del sector del automóvil volvió a incrementar en 2022, con más de 85,01 millones de vehículos a nivel mundial. Esta cifra supone un incremento del 6 % frente a las cifras del año previo, según la Organización Internacional de Constructores de Automóviles (OICA).
AMENAZANDO A LAS MARCAS EUROPEAS
China encabeza la lista de los países que más automóviles han producido, cuyos datos superan a los de EE.UU., Japón e India juntos. El gigante asiático ocupa el primer puesto en la fabricación de coches en el mundo, con 27,02 millones de unidades. La segunda posición se la lleva Estados Unidos, con 10,06 millones. Por detrás, le sigue Japón concentrando 7,83 millones de unidades. India, en cuarto lugar, ha producido 5,45 millones de vehículos.
Sin embargo, las marcas chinas, además de subir al top en producción, también lo están haciendo en calidad e innovación. De esta manera, el país asiático está amenazando la supremacía de la que gozaban Japón, Estados Unidos y Europa hasta la fecha.
LA ELECTRIFICACIÓN: UN FACTOR CLAVE
La electrificación de los vehículos ha revolucionado el automóvil. En noviembre de 2022 se produjeron unas cifras récord en ventas mundiales de vehículos eléctricos enchufables, con más de un millón de nuevas matriculaciones, según datos de Inside EVs.