El consultor James Litton reflexiona en Car Dealer Magazine sobre cómo podrían ser los equipos de venta del concesionario en 10 años.
Los distribuidores están afrontando cambios radicales en su modelo de negocio para adaptarse a las nuevas necesidades del mercado. Esto implica una transformación del personal y, por tanto, la llegada de nuevos perfiles profesionales al concesionario. El consultor James Litton, con gran prestigio en el sector, reflexiona en Car Dealer Magazine sobre cómo podrían ser los equipos de venta y vendedores del concesionario en 10 años.
Más diversidad
La primera gran predicción es que los equipos de venta del concesionario serán más diversos en la próxima década. Apunta que si bien ya se están emprendiendo acciones que favorecen a los equipos mixtos, la presencia de mujeres será más potente en los próximos años en este departamento.
La igualdad, de acuerdo con las predicciones del consultor, llegará a todos los grupos del concesionario, independientemente del puesto.
Más conectado
El personal de ventas del concesionario tendrá que abogar más, si cabe, por la digitalización y la conectividad. El consultor pone de ejemplo que cada vez es más frecuente que un concesionario publique en redes sociales videos realizados por el personal de ventas de forma interna. Explica que estos videos personalizados serán cada vez más populares e influirán con mayor decisión en el proceso de compra del cliente.
Augura, además, que el valor de esta acción estará en saber cómo monetizar esta actividad de manera que influya en los ingresos y en el resultado de ventas.
Más digitalizado
Dado que es probable que los modelos de ventas de agencias dominen la mayoría de las redes de fabricantes, el personal de ventas deberá dominar el campo online. En 10 años no habrá razón por la que los compradores no puedan simplemente coger su móvil y comprar un vehículo sin siquiera hablar antes con un ser humano.
Financiación y seguros
El consultor también prevé que los productos relacionados con la financiación y seguros pasen a ser cada vez más digitales. Incluso afirma que puede ser que en 10 años el cliente realice este trámite desde casa sin siquiera pasar por el concesionario.
“No estoy seguro de cómo de radicales les parecerán algunos de estos cambios a los lectores. Si es cierto que siempre existirá la necesidad de que alguien “venda” un automóvil, pero la forma en que se logra ese resultado final seguirá evolucionando”, señala.