En 2024 Bruselas implementó precios de venta mínimos a los eléctricos procedentes de China, después de una investigación en la que calificaba a Pekín de desarrollar competencia desleal.
La Unión Europea y China tienen previsto trabajar de manera conjunta para solucionar el principal problema al que se enfrentan: el establecimiento de aranceles por Estados Unidos, que afectan especialmente al mercado de los vehículos eléctricos. Según informa la agencia Reuters, ambos bloques tienen previsto analizar las tarifas que aprobó Bruselas en 2024, entre las que destacan la implementación de precios de venta mínimos para los eléctricos chinos que lleguen hasta la Unión Europea, tras conocerse que en Pekín otorgaban una serie de subvenciones estatales a las compañías asiáticas, lo que se traducía a los ojos de la Unión Europea en competencia desleal.
Tal y como afirma la citada fuente, el comisario de Comercio de la UE, Maroš Šefčovič, en una sesión con Wang Wentao, ministro de Comercio de China, parece que han llegado a un acuerdo para avanzar sobre este punto. Y es que, todo parece indicar, que desde China estarían dispuestos a poner en marcha los nuevos acuerdos a la máxima brevedad, dando lugar a unas relaciones más fuertes entre la Unión Europea y China frente a la actitud que en las últimas semanas ha partido desde Estados Unidos.
Los aranceles de Estados Unidos
Aunque desde Estados Unidos anunciaron la paralización durante 90 días de los anunciados aranceles a más de 75 países, en el caso de China se han visto incrementados hasta el 145%, mientras que desde Bruselas tienen previsto establecer nuevos puentes para dialogar con Washington.