Los datos de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) revelan una escasa penetración de los vehículos sostenibles entre los pesados, con tan solo un 0,6 % de eléctricos entre las matriculaciones.
La apuesta por la sostenibilidad en los vehículos pesados tiene un largo camino por delante. Según los últimos datos presentados por la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA), casi todos los camiones matriculados en la Unión Europea durante el año 2022 fueron diésel: hasta un 96,6 % del total. En lo que respecta a los de gasolina, estos supusieron tan solo el 0,1 %.
En los de combustión interna hubo subidas y bajadas: los de gasoil subieron un 3,7 % respecto al ejercicio anterior, mientras que los de gasolina bajaron un 17,4 % en este sentido merced a sus 157 unidades. Según la ACEA, el 60 % se vendió en el país de Finlandia.
CRECE LA ELECTRIFICACIÓN, PERO SIGUE SIENDO ESCASA
Lejos de contar con una profunda implementación, la electrificación tan solo aportó el 0,6 % de los camiones matriculados en la UE, aunque al mismo tiempo crecieron un 32,8 % respecto a 2021 gracias a sus 1.656 unidades, de las cuales la mitad fueron comercializadas en Alemania (829).
Los camiones matriculados en la UE propulsados por combustibles alternativos (gas natural, gas licuado por petróleo, biocombustibles o etanol, entre otros) vivieron una situación similar, con una cuota del 2,8 %, aunque en su caso experimentaron bajadas: las 7.915 unidades matriculadas supusieron un descenso interanual del 19,9 %. Desde la institución comunitaria señalan a Alemania como el “principal contribuyente al desempeño negativo en la región”, argumentando que en el país alemán se produjo una caída interanual del 34,2 %. Todo ello en medio de la paralización de la votación sobre la prohibición de la venta de vehículos de combustión a partir de 2035, motivada en parte por la posición de Alemania.