España destaca por dar una enorme importancia al área de la posventa, incluso superando a países como Japón, Estados Unidos y Alemania.
Un estudio global realizado por Deloitte destaca la importancia de la transparencia en los costos y la posibilidad de interactuar físicamente con el vehículo durante el proceso de adquisición como los aspectos mejor valorados por los usuarios y clientes.
De los ocho países analizados por la firma de servicios profesionales, España destaca por dar una enorme importancia al área de la posventa, incluso superando a mercados como Japón, Estados Unidos y Alemania. En España, ocho de cada diez conductores confían en el sector de posventa. Concretamente, casi la mitad de ellos, un 47 %, cuenta con garantías en su taller oficial de confianza, mientras que un 33 % las tiene en el concesionario oficial donde compró el vehículo, dejando al fabricante o marca con un 13 % residual, según señala el informe.
A su vez, nuestro país se sitúa como el segundo mejor valorado en cuanto a la confianza que los usuarios depositan sobre los grupos de distribución oficiales, solo superado por Japón y por delante de dos grandes potencias como Alemania y Estados Unidos. En contraste, la confianza de los compradores españoles en la marca o fabricante es la menos valorada de los ocho países que se han analizado.
Entre los factores más importantes para los compradores a la hora de adquirir un vehículo, la transparencia en los costos reales del automóvil es la mayor preocupación para dos de cada tres compradores (65 %). En segundo lugar, los conductores españoles valoran enormemente la posibilidad de interactuar físicamente con el vehículo durante el proceso de compra, y aquí es donde juega un papel crucial el concesionario oficial.
EL ELÉCTRICO NO TERMINA DE CALAR
Otras conclusiones del estudio de Deloitte revelan que el vehículo eléctrico aún no ha ganado una fuerte adopción entre los compradores. A pesar de que la intención de compra ha aumentado un 6 % este año, con un 13 % de los compradores interesados, los híbridos son la preferencia principal (33 %), seguidos de cerca por los vehículos a de combustión interna (31%) y los híbridos enchufables (19%). No obstante, el 47% de los interesados en la compra de vehículos eléctricos reconsideraría su decisión si hubiera la opción de un combustible sintético sostenible.
Por otro lado, el informe también destaca que el 70 % de la población nacional vive o trabaja en edificios y locales donde actualmente es inviable instalar una infraestructura para cargar baterías de vehículos eléctricos. Esto es especialmente notable en áreas rurales, donde las distancias a recorrer son mayores y las infraestructuras eléctricas adecuadas están algo limitadas.